Es difícil no sentir miedo cuando noche tras noche espero
sentada, rodeada de oscuridad y con el frío cortándome la piel.
¿Vas a volver a buscarme?
Se que no lo dijiste, que nunca lo prometiste, que de tus
labios jamás salió la palabra “volveré”. Pero tu ausencia es demasiado dolorosa
como para no desear un recuerdo inventado. Una realidad solo mía. Un final
diferente con los mismos actores…
Noche tras noche regreso cansada, con la mirada perdida y el
cuerpo frío.
Mi piel está triste, recuerda tu tacto, el calor de tus
manos, el peso de tu presencia.
Cada parte de mi cuerpo grita de rabia al no encontrarte
oculto entre las sabanas. Se enfada y me empuja a levantarme, quiere que vuelva
a la noche, que te busque y te encuentre. Lucha conmigo hasta que pierdo el
aliento, entonces me permite dormir, perderme en sueños pesados de manos solas
y lágrimas eternas.
Es difícil no sentir miedo cuando se que abriré los ojos y
de nuevo el frío y la oscuridad serán lo único que besen mi cuerpo.
¿No volverás a buscarme?
Tal vez tu voz a penas fue un susurro…
Tal vez no pude escucharte…
Tal vez tu “volveré” se perdió entre la gente…
Amaya Alvarez
Cada vez lo haces mejor.
ResponderEliminarSaludos.
Gracias Rosa, de verdad, muchísimas gracias. Cada vez siento que lo hago peor, asi que leer tu comentario me ayuda a seguir.
ResponderEliminarUn beso